De Adrés Binetti y Alejandro Lifschitz ¿Sabes qué es lo que la gente quiere ver? Quieren ver lo que ya conocen. Un sótano húmedo es propicio para reflexiones y confesiones… con la ironía que siempre suaviza dolores remotos.
Nunca está solo el hombre si los fantasmas siguen viviendo en su mente y dialogan en tiempo presente. Una obra fuerte, intimista, inesperadamente tierna, en la que es inevitable sonreír ante los contrastes y que deja infinidad de fragmentos de espejo donde reflejarse. Con actuación y dirección de Silvio Gressani.
Duración: 60 minutos.
Domingos a las 18.
Localidades, 1.000 pesos.
El Crisol (Malabia 611).