A 23 años de la fundación de Malba, llega Malba Puertos, un nuevo espacio de exhibición versátil e inclusivo en la provincia de Buenos Aires. Emplazado en la localidad de Escobar a 50 km de la sede original, Malba Puertos se propone acercar ideas, proyectos federales y voces destacadas de la escena artística actual a nuevas comunidades, a través de un programa de exposiciones y actividades culturales.
Malba Puertos es el nodo en una trama urbana-artística generada por el Circuito Público de Arte. Las más de veinte obras site specific del programa se implantan en toda la ciudad de Puertos, en armonía con el Lago Central de doscientas hectáreas y la Reserva Natural sobre el Río Luján.
El museo, de entrada libre y gratuita, está conformado por espacios interiores y exteriores que ofrecen diferentes formatos y soportes expositivos. Entre ellos se encuentra la reserva técnica, que alberga obras de la Colección Malba y la Colección Eduardo F. Costantini y está a la vista del público.
Malba Puertos se proyecta como un espacio accesible, comunitario, educativo e interdisciplinario, integrado al paisaje y su entorno natural.
EXPOSICIÓNES TEMPORARIAS
Ensayos naturales I
Mondongo-Ouvrard. Curadora: Alejandra Aguado
Ensayos naturales es una exposición en dos capítulos. En el primero de ellos, doce paneles de la instalación pictórica Argentina (paisajes), 2009-13, del dúo Mondongo (Juliana Laffitte, Buenos Aires, 1974; Manuel Mendanha, Buenos Aires, 1976), conviven con otras doce pinturas de Luis Ouvrard (Rosario, 1899-1988) realizadas entre 1966 y 1986. En un recorrido que semeja un bosque escenográfico, los paisajes tupidos, inquietantes y de gran escala de Mondongo se contraponen las obras de pequeña escala de Ouvrard que, sobre una mágica pampa santafesina, llaman la atención sobre los frutos de la tierra.
El proyecto busca poner en valor a la pintura como un acto de imaginación que permite volcar la mirada maravillada sobre lo que nos rodea y hacer visible la vitalidad y capacidad de transformación del espacio que habitamos.
Si bien presentan panoramas en apariencia opuestos, ambos conjuntos de obras –que son exhibidas en duplas en soportes individuales– comparten la fuerza para hipnotizarnos y sumergirnos en la conciencia de que la naturaleza está “repleta de acontecimientos fantásticos”, tal como escribió, refiriéndose a la experiencia de la noche, el naturalista Henry David Thoreau, de cuya compilación de ensayos está tomado el título de este proyecto.
Ouvrard ofrece la experiencia singular de una pintura que es paisaje y naturaleza muerta al mismo tiempo, en la que la tierra es mesa, la mesa, huerto, y la fruta, ofrenda, fantasía y cuerpo. Por su parte, Mondongo, propone una pintura cinematográfica e infinita, que nos envuelve con su profundidad y movimiento. Juntos, estos artistas ensayan una nueva geografía y biología metafísica, invitando a un paseo que, sin llegar a ser laberíntico, propone perderse, esconderse y observar.
A partir de diciembre, las mismas pinturas de Mondongo estarán acompañadas por collages de la artista Rosana Schoijett (Buenos Aires, 1969), en los que predomina la aparición de la flor: otra expresión de la belleza y riqueza del suelo que a su vez revela nuestra necesidad y deseo de crear pequeños paraísos en la tierra.
Del 22 de septiembre al 2 marzo de 2025. Salas del Lago
La vida que explota
Gabriel Chaile, Claudia Alarcón y Silät. Curadora: Andrei Fernández
La vida que explota propone un diálogo entre el conjunto escultórico de cinco seres antropomorfizados que Gabriel Chaile presentó en la Bienal de Venecia en 2022 –expuestos ahora de modo permanente en Malba Puertos– y las obras textiles de la artista wichi Claudia Alarcón y el colectivo de tejedoras Silät.
Las criaturas totémicas de Chaile llevan los nombres de los miembros de su familia y son el resultado de un proceso de mutación que comienza con la fascinación por el poder de la imagen y la sugestión del lenguaje estatuario. Chaile recupera sus orígenes en la forma de esculturas monumentales de barro, artefactos que también pueden ser encendidos, dar calor y funcionar como hornos que producen alimentos.
En diálogo con estas esculturas, se presentan aquí piezas de arte textil de la artista salteña Claudia Alarcón y del colectivo de tejedoras Silät, que reúne a mujeres wichis que luchan por la defensa de la memoria colectiva y la creatividad de su cultura. Estas artistas trabajan el hilado de chaguar –una planta herbácea con hojas suculentas y espinosas, distintiva del Gran Chaco de la cultura wichi– con imágenes contemporáneas y complejos ensamblajes geométricos. Los textiles de chaguar hace mucho circulan en las ciudades en forma de bolsas, llamadas yicas, y en estos últimos años han crecido para ser grandes paños pensados para la contemplación y ya no para el uso.
Las piezas textiles enlazan diseños del lenguaje visual del pueblo wichi, que se interrumpen y resignifican con explosiones que son pronunciamientos de fuerza y de alegría que crecen. Ocupan el espacio de una forma nueva, para alcanzar lo que fue antes arrebatado como destino. Junto a las criaturas de Chaile, proponen recuperar personajes e historias que desobedecen a las negaciones de la memoria que impone la colonialidad.
Del 22 de septiembre al 2 marzo 2025. Sala Chaile
Acto reflejo – Amadeo Azar
Cruzando el concepto de reserva técnica del museo –el espacio en que se resguardan las obras cuando no están en exhibición– con el de la reserva natural de Puertos, Amadeo Azar crea una serie de acuarelas que relacionan una selección de obras de la Colección Malba con la flora y fauna autóctona de la zona.
La singularidad de la reserva técnica de Malba Puertos está dada por una amplia vidriera que deja ver tanto lo que sucede adentro en un ambiente controlado y artificial, como lo que sucede afuera en la espontaneidad de la naturaleza. Como en las Wunderkammer –las cámaras de maravillas del siglo XVI en donde el público podía apreciar ejemplares exóticos del arte y de la naturaleza–, ambos mundos aquí se acercan.
En este marco espacial, ajeno al de la exhibición tradicional museística, Azar pone en primer plano obras de artistas como Alejandra Seeber, Jorge Gumier Maier, Magdalena Jitrik y Liliana Maresca, entre otros. Reinventándolas en sus pinturas, transforma el significado original de las obras, conectando arte y naturaleza y generando poderosos desplazamientos de sentido. Se trata de un homenaje a otros artistas y también a una historia en común que los une.
Dice la artista Leticia Obeid, invitada a escribir sobre esta muestra: “Al retratar las obras elegidas, Azar les ha dado el abrigo del tiempo, las ha imaginado sobreviviendo a una catástrofe, ha alargado sus vidas, así como dice la superstición que sucede cuando soñamos la muerte de alguien querido. En este escenario acuático, la pintura y la escultura se mezclan con hojas, tallos, flores y árboles. Si el fin del mundo humano ya ocurrió, ellas parecen haber sobrevivido en todo su esplendor”.
La serie de intervenciones en la reserva de Malba Puertos se creó para que sucesivos artistas invitados trabajen con las nociones de exhibición y de resguardo como disparadores para crear obras inéditas, para refrescar la mirada hacia otras conocidas, pero quizás olvidadas, y para repensar el rol de la arquitectura, el coleccionismo y los espacios de exhibición y de guarda.
Del 22 de septiembre al 2 de marzo 2025. Reserva técnica.
Mueble escultura
Curadoras: Cinthia Kazez y Lucila García de Onrubia. Artistas: Agustina Woodgate, Benjamin Felice, Daniel Basso, Deon Rubi, Federico Cantini, Florencia Sadir, Gabriel Fortunato Chalabe, Grupo Bondi, Item, Marcolina Di Pierro, Mariela Vita, Marina Ercole, Ramiro Quesada Pons, RIES, Sietes y Sofia Durrieu.
¿Qué es un mueble y qué es una escultura? ¿Existe un punto preciso en dónde termina la funcionalidad y comienza la poética? En Mueble escultura, las ideas de utilidad e inutilidad se trastocan y nos confrontan con nuestras ilusiones y prejuicios en el borde de lo posible, donde el arte y el objeto de uso se amalgaman y se cuestionan mutuamente.
Este proyecto nació de la necesidad de desarmar categorías convencionales y de desafiar las expectativas que ponemos sobre los objetos. Provenientes de diferentes rincones de la Argentina, las piezas desdibujan la funcionalidad con un uso imaginado, una interacción no predeterminada, guiada por el deseo de explorar: almohadas de cemento que desafían la percepción de confort, una moldura de crema gigante que evoca a un asiento urbano, un dispositivo que provee bolsas de agua potable en caso de emergencia, criaturas que invitan a descansar sobre ellas, un tótem para trepar y reposar el cuerpo, muros de ladrillos de barro que guardan técnicas antiguas y mensajes, mesas que se niegan a sostener objetos en un aparente acto de rebeldía.
Las Salas del Bosque, un espacio al aire libre donde dialogan arte, arquitectura y naturaleza, proporcionan el contexto ideal para la indagación accesible e inclusiva. Pero permiten también algo más íntimo: una reflexión sobre lo que significa habitar el mundo, sobre cómo nos movemos a través de él y cómo a veces, al igual que estos muebles-escultura, necesitamos alejarnos de las definiciones rígidas que intentan contener lo que, en esencia, es inclasificable.
¿Es posible la existencia de un mueble disfuncional? ¿Puede ser el arte útil a un cuerpo? Mueble escultura abre un campo de experimentación en el cual las disciplinas se entrecruzan y las clasificaciones se diluyen. En este terreno difuso se revela su verdadero poder: la capacidad de generar un espacio de libertad y reflexión.
Del 22 de septiembre al 2 de marzo 2025. Salas del Bosque
Circuito de Arte Público
El Circuito de Arte Público recorre toda la ciudad de Puertos en armonía con el Lago Central de doscientas hectáreas y la Reserva Natural sobre el Río Luján. Está compuesto por veintitrés piezas diseminadas a lo largo de un museo sin paredes, que transforman el paisaje y crean sorprendentes espacios de uso comunitario. Estas esculturas e instalaciones de gran escala dialogan con el entorno que las circunda –el paisaje, la vegetación, las condiciones ambientales, la arquitectura– ofreciendo una vivencia única a los visitantes de todas las edades. Las esculturas monumentales de Gabriel Chaile son parte del circuito y se emplazan en su propia sala en Malba Puertos.
Escribe la crítica María Gainza: “Caminar en contemplación es una actividad que no funciona con escépticos. Es necesario una pizca de credulidad, creer en el poder del arte y en la potencia de la naturaleza. Emplazadas a la orilla de la laguna, entre plantas nativas, en medio de plazoletas, escondidas en la reserva, las esculturas tienen aire alrededor, eso que los museos y galerías siempre están obsesionadas en prefabricar. Y ese aire, como un ectoplasma, va uniendo las imágenes con tus pasos”.
Artistas: Pablo Accinelli, Florencia Almirón, Daniel Basso, Diego Bianchi, Gabriel Chaile, Martín Blaszko, Fabián Burgos, Eugenia Calvo, Paula Castro, Matías Duville, Carolina Fusilier, Daniel Joglar, Irina Kirchuk, Irene Kopelman, Mimi Laquidara, Artur Lescher, Jorge Macchi, Hernán Marina, Sebastián Mercado, Ramiro Oller, Sol Pipkin, Nicolás Robbio, Marcela Sinclair.
Del 22 de septiembre al 2 de marzo 2025. Puede visitarse de martes a domingo de 12 a 19. Lunes cerrado
Entrada libre y gratuita.
Malba Puertos (Alisal, Puertos, Av. de la Bahía 160, Belén de Escobar, Provincia de Buenos Aires).